La quinta ronda de negociaciones del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), la última del año, arranca este miércoles esperando que se traten los temas más espinosos, con un tentativo cierre de tres capítulos, y con la ausencia del Ildefonso Guajardo, secretario de Economía de México, Robert Lighthizer, representante de Comercio de Estados Unidos y la canciller de Canadá, Chrystia Freeland.
A decir de César Buenrostro, socio de Comercio Internacional y Aduanas de KPMG, la decisión tomada después de la cuarta ronda sobre ampliar las conversaciones disminuyó el temor del retiro inminente de Estados Unidos del acuerdo, que en su opinión, tiene 55% de alcanzarse. No obstante, una postura endurecida de los Estados Unidos y una fecha límite ajustada aumenta el riesgo de que las negociaciones fracasen.
De ahí que no haya duda de que esta será la jornada más difícil hasta ahora.
"Es una de las rondas mas complicadas porque ya se han planteado en las cuatro anteriores algunos de los temas que Estados Unidos quiere promover. Hay que recordar que aquel país promovió 19 temas distintos para modernizar el TLCAN", recordó Alejandro Arzate Mejía, Integrante de la Comisión Fiscal 1 del Colegio de Contadores Públicos de México.
Los frutos de la discordia
Hace unos días Eugenio Salinas, secretario del Consejo Consultivo de Negociaciones Internacionales (también conocido como Cuarto de Junto en las negociaciones), indicó que se buscará cerrar tres capítulos en esta quinta ronda: Coherencia Regulatoria, Telecomunicaciones y Comercio Transfronterizo, que de dar por terminados se sumarían a los dos acuerdos que se han alcanzado hasta ahora, en los apartados de Pymes y Competencia.
Respecto a esto último, Alejandro Arzate puntualizó que Estados Unidos promueve mucho la seguridad en aduanas para que haya una mayor digitalización de los procesos, debido a que cuando se embargan algunas mercancías es común que se almacenen y deterioren, un costo que debe asumir el gobierno mexicano.
En cuanto a la coherencia regulatoria, agregó el especialista, Estados Unidos está promoviendo un capítulo de seguridad jurídica, que en resumen se trata de que no se estén cambiando las reglas del juego.
"Como sabemos, hay inversiones a largo plazo, de 15 o 20 años, y se tienen que erogar bastante, tener certeza. En México vimos por muchos sexenios como el Impuesto Sobre la Renta iba variando; se bajó, subió, se puso tope de 30% y luego se eliminó", ejemplificó.
Sin embargo, estos capítulos -a consideración de Alejandro Arzate- son transitables, es decir, "sólo requerirían de voluntad política para cerrarlos", por lo que los verdaderos temas espinosos continúan siendo los que se pusieron sobre la mesa desde la primera ronda de negociaciones: las reglas de origen, solución de controversias, y otros como comercio de bienes agropecuarios y cambios en el mercado laboral mexicano.
El tema de reglas de origen ha sido muy polémico, sobre todo para México. Estas reglas "garantizan que el contenido de las piezas de algún producto sean del contenido de un país, es decir, de México, Estados Unidos o Canadá, y se llama contenido regional", recordó el especialista del Colegio de Contadores, siendo el tema automotriz el que más preocupa.
"Actualmente la industria automotriz tiene 62.5% como mínimo de contenido regional; Estados Unidos lo quiere elevar al 85%, 50% de ese 85% que sea de Estados Unidos. Es una propuesta bastante agresiva y obviamente es algo que México y Canadá han rechazado rotundamente, pero es algo que se va a plantear en la quinta ronda", consideró Alejandro Arzate.
Por su parte, César Buenrostro consideró que hay espacio para el consenso sobre todas las propuestas, siendo el tema de los mecanismos de resolución de controversias el más difícil, el famoso Capítulo 19, que es de particular interés de Estados Unidos y Canadá, ya que el gobierno de Trump quiere eliminarlo, y es una de las condiciones de Canadá para continuar en el Tratado.
"Es probable que México y Canadá coadyuven con algunos de los temas menos contenciosos, incluyendo el texto final para el comercio digital, las políticas anticorrupción y los derechos de propiedad intelectual, con el fin de obtener apalancamiento y encontrar un punto medio. En última instancia, que el acuerdo se concluya depende de que Estados Unidos reconsidere sus demandas", agregó.
Aunque oficialmente a quinta ronda de negociaciones del TLCAN se llevará a cabo del 17 al 21 de noviembre en la Ciudad de México, desde el miércoles 15 algunos equipos de trabajo de los países miembros se han reunido a dialogar.