El gobierno de México decretó luto nacional por tres días, empezando este viernes, en memoria de las 61 personas que murieron a consecuencia del sismo de magnitud 8.2 el día anterior.
Durante un recorrido por Juchitán de Zaragoza, Oaxaca, uno de los municipios más devastados por el temblor, el presidente Enrique Peña Nieto también decreto que este 7 de septiembre sea recordado como de duelo nacional.
El duelo nacional implica, exclusivamente, el izamiento de la bandera nacional a media asta en todas las escuelas públicas, privadas y en todas las instituciones de gobierno, así como en la sede de las representaciones diplomáticas y consulares de México, de acuerdo con la Ley sobre el Escudo, la Bandera y el Himno Nacionales en su Artículo 15.
Hay fechas establecidas para el izamiento a media asta, pero la misma ley establece que será a discreción del mandatario actual, añadir más fechas.
Tomando en cuenta esta facultad, a partir del próximo año, cada 7 de septiembre deberá cumplirse el decreto presidencial.
Esta es la segunda vez que Peña Nieto decreta un luto nacional durante su presidencia. El primero ocurrió tras la explosión en el edificio de Petróleos Mexicanos (Pemex) en Ciudad de México, donde murieron 33 personas el 31 de enero de 2013.